Análisis Killer is Dead

Mi trabajo... Killer is Dead

Catalogado por muchos como el Tarantino de los videojuegos, Goichi Suda (aka Suda51) nos vuelve a taladrar la cabeza con sus estrambóticos personajes, peculiar estilo artístico y gore; aunque eso sí, en el buen sentido.

Si por algo se han caracterizado los juegos del creativo es por contar con sexys féminas, litros de sangre por doquier y acción a diestro y diestro; nada de complicados guiones cargados de complejos giros en la trama o una jugabilidad que requiera de tiempo para hacernos con ella, para nada. 'Killer is Dead' al igual que cualquiera de sus anteriores trabajos va directo al grano, no se anda por las ramas.

El título que nos ocupa nos pone en la piel de Mondo Zappa, llamado también "ejecutor" y es que nuestro protagonista es un asesino a sueldo katana en mano encargado de eliminar a cualquier indeseable que ponga en peligro a la humanidad. Dotado con un brazo cibernético y un carácter un tanto peculiar, Mondo no durará en poner fin a la vida de aquellos que lo merezcan ya sean vampiros o jefes Yakuza. La organización para la que trabaja no está exenta de personajes que destilan humor y ácidos comentarios. Bryan y quién asimismo incorpora varios implantes cibernéticos,  será el jefe de ésta y a quién se dirijan los clientes a la hora de pedir ayuda. También encontramos a Vivienne, una rubia de armas tomar y Mika, compañera de piso de Mondo y quién acudirá en nuestra ayuda cada vez que desfallezcamos en combate; como comprobaréis por vosotros mismos, un elenco de lo más vistoso y variopinto.

No es nada descabellado pensar que una vez estéis delante de 'Killer is Dead' os sintáis perdidos ante la trama, digamos, que tengáis esa sensación de estar un tanto perdidos. Tranquilos, si bien al principio las primeras misiones servirán a modo de tutorial para conocer los controles e introducirnos a los personajes de la agencia, a partir del episodio 3 el desarrollo del juego también contará con escenarios que sirvan para conocer un poco más del pasado de Mondo, y por ende el por qué de su transformación. Aún con todo y con esto, hay que decir que el juego queda dividido en 12 episodios principales, y otras tantas misiones secundarias. Corto a priori y que como decimos un conjunto en el que se intercalarán capítulos  para saber un poco más del protagonista y los encargos de asesinato; pero cuya duración puede verse aumentada hasta por encima de las 10 horas si realizamos las misiones secundarias a modo de desafío o nos detenemos en la modalidad Gigoló y de la cual hablaremos más adelante.

En definitiva una historia que si bien a muchos os puede parecer que no tenga ni pies ni cabeza, solo los amantes de las obras de Suda51 sabrán apreciar gracias a ese toque que el creativo sabe impregnar en ellas. Con un estilo artístico carismático y unas secuencias donde cada fotograma parece sacado de una novela gráfica, 'Killer is Dead' es uno de esos títulos que puede entrar por los ojos... o no.

Acción en vena, pero sin complicaciones

Ya lo hemos dicho varias líneas atrás, 'Killer is Dead' es ante todo un juego de acción directo y sin complicaciones. No esperéis complicados combos, un gran número de armas y que cada una de ellas esté pensada para un tipo concreto de enemigo. El título de Suda51 se apoya en el frenetismo de los combates aderezado por su espectacular apartado artístico. Desde unos enemigos cibernéticos que cuentan con un diseño a cada cual más variado, pasando por los espectaculares jefes finales y sus secuencias de presentación; pasando hasta por los diferentes escenarios y que nos llevarán a recorrer desde Kyoto hasta una discográfica a ritmo de Dubstep. Todo, absolutamente todo, contiene el sello de Goichi Suda allá por donde lo miremos.

Los combates no contarán con la profundidad que buscan los más expertos del género, pero no por ello dejará de ser menos divertido. Mondo cuenta en cada misión con su fiel katana (cuadrado/X) así como la mutación robótica de su brazo (triángulo/Y). La primera será el arma principal del protagonista, mientras que el miembro nos servirá para romper la defensa de los enemigos o asestar fuertes golpes con la habilidad requerida. En referencia a éstas, es donde principalmente notamos la ausencia de toda profundidad a la hora de ponernos a los mandos y querer ahondar en los combates. Tan solo contaremos con tres ramas, mediante la recogida de unos cristales amarillos cada vez que eliminemos enemigos podremos mejorar las capacidades de Mondo. Las habilidades van desde que ataquemos más rápido, el daño del brazo-pistola aumente, o que mediante la sangre y que ejerce a modo de magia podamos recuperar vida por citar algunos ejemplos; también tenemos la posibilidad de comprar combos, aunque la efectividad de estos durante los enfrentamientos realmente no decante la balanza de un lado u otro. Al jugador que se "curre" un buen número de combos se le dará la opción de elegir el premio en forma de gemas o cristales antes de que acabe una cuenta atrás, dependiendo del botón que escojamos nos llevaremos un botín u otro.