Análisis Kirby y el Laberinto de los Espejos

Con este veterano título, la simpática bola rosada de Hal Laboratory ya ha hecho varias incursiones en Wii U. La plataforma de Nintendo cuenta en su haber con cinco títulos, contando este, de los más clásicos del personaje. Desde Super Nintendo y Game Boy, hasta Game Boy Advance, la última en hacer aparición. Por si fuera poco, está no será la última incursión de Kirby este año. A modo de recordatorio, el mes de mayo será el estreno en Nintendo 3DS de su nueva aventura con 'Kirby Triple Deluxe'. Mientras esperamos el desembarco de este, vamos a calmar el apetito con el título de Game Boy Advance. Un título que ha perdido su principal esencia por el camino, el multijugador.

No sigas la línea

'Kirby y el laberinto de los espejos' es, si no me falla la cabeza, el único título de la serie en desechar la linealidad. Al contrario que en los títulos anteriores y posteriores, en este el desarrollo de los niveles carece de un orden establecido. Los fans de la saga conocen a la perfección cómo se desarrollan los juegos. En los diferentes títulos que hemos visto, íbamos de nivel en nivel todo seguido y sin posibilidad de poder elegir otros niveles. En el laberinto de los espejos esa regla se rompe, al dejarnos total libertad para elegir los niveles cómo y cuándo queramos. Nada más pasarnos el primer nivel, vemos como un mapa se despliega delante de nosotros y nos permite observar el desarrollo de la aventura.

Nuestro principal cometido no es otro que encontrar las partes rotas de un espejo mágico. Unas misteriosas sombras con el aspecto de Kirby y Meta-Knight han salido del espejo, que refleja la maldad interna, y han puesto Dream Land patas arriba. Meta-Knight se enfrente a su doble pero es derrotado con suma facilidad por su sombra. Esta corta el espejo en ocho pedazos, con Meta-Knight dentro, y los esparce por un laberíntico mundo que está interconectado por puertas. Tendremos que visitar un total de ocho niveles diferentes, más el final, y cada uno de ellos guardará las partes del espejo que necesitamos para reconstruirlo. No es tarea sencilla debido a que las puertas de acceso a los mundos las tendremos que desbloquear nosotros en los niveles.

Como ya sabéis, Kirby hace uso de un buen número de habilidades, a las que hay que sumar otras tres, en forma de Kirby. Nuestro protagonista ha sido dividido en cuatro partes, la original y tres más de otros colores. Podemos ir con los cuatro a la vez, cosa poco aconsejable debido a la pobre Inteligencia Artificial del juego. También podemos optar por llamarlos por el móvil. Sí, Kirby tiene móvil, que irá agotando su batería según lo usemos para llamar a los clones o volver al principio del nivel. Los clones pueden adquirir las mismas habilidades de Kirby, de forma automática y acabar con los enemigos. Si con uno es fácil, con cuatro es un paseo en barca, y con el agua en calma.

Oiga, ¿por aquí se va p´allá?

El desarrollo de los niveles es sumamente caótico es un primer momento. Sin embargo, cuando le vas pillando el tranquillo se hace un  poco más llevadero. Los niveles están atestados de puertas que llevan a diferentes lugares por lo que dar con la correcta para desbloquear el siguiente no es precisamente fácil. No es un juego difícil en cuanto a los enemigos y sus rutinas, es más lioso que otra cosa. Los niveles requieren de exploración para poder dar con todos sus secretos, que no son pocos precisamente. Con las habilidades de Kirby, el poco daño de los enemigos y la gran cantidad de objetos de curación, los paseos por los niveles se hacen llevaderos y no tenemos que preocuparnos de nada.

Si os liais en exceso, pulsad el botín de pausa, después dar al select y tendréis un completo mapa de las niveles. En él podréis ver las zonas que no habéis visitado y como se llega a ellas, más o menos detallado. ATENCIÓN, los mapas hay que encontrarlos en los niveles, no nos los regalan. Además de los trozos de espejo, derrotar a los enemigos y desbloquear las puertas, en los niveles hay otras cosas que hacer. En los niveles hay una serie de partituras que debemos recoger si queremos acabar el juego al 100%. Podremos escucharlas en el reproductor, en la zona del Museo, donde también podemos acceder a otras opciones. Disponemos además de un inútil modo multijugador para uno solo, con tres pruebas iniciales más una oculta.

Exactamente igual que hace 10 años

En cuanto al tema gráfico hay poco que comentar. El juego se ve exactamente igual que en Game Boy Advance. Muy colorido, con los personajes muy bien definidos y todo perfectamente detallado para la máquina que lo movía. Como es un port 1:1, las únicas mejoras que os vais a encontrar son la de adaptar el juego a una pantalla más grande para que no sea un festival de cortes. Al igual que pasaba en 'Metroid', 'Mario Kart' o 'Advance Wars', el título tiene la opción de un modo suavizado de bordes. Se activa de la misma forma, bien por el menú de opciones o más rápido, pulsando el stick derecho en medio de la partida.

A nivel de efectos en pantalla, animaciones y tal, sigue siendo igual de bueno. No hay ralentizaciones, todo se mueve de una forma fluida. Kirby es la estrella y es el que más amplia gana de movimientos tiene. Por supuesto, el juego lo podemos disfrutar desde la pantalla del Gamepad de Wii U emulando a la portátil, solo que con más calidad en la imagen. Como os dije en el análisis del 'Metroid Fusion', ¿y si hubiese estado en HD? Pues sin duda alguna tendría un mejor acabado, más limpio y menos pixelado. Pero Nintendo ha optado por llevarlos tal cual estaban en Game Boy Advance, y es esto lo que hay...