Análisis Prototype

(360)

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Un buen título jugablemente sublime y técnicamente con buen rendimiento, pero muy bajo en cuanto a gráficos.

Plataforma analizada: Xbox 360
26/06/2009 07:00
Los sandbox son títulos de acción libre, donde se nos ofrece una ciudad (o varias) para explorar libremente, hacer misiones secundarias y, de vez en cuando, armar un buen cirio en sus calles. Sin duda esta clase de juegos tienen un claro rey, un dios indiscutible: Grand Theft Auto. La saga de Rockstar ha mostrado en cada una de sus entregas el camino que debía seguir el resto, y la verdad es que solo un par de títulos han llegado tan siquiera a soplarle la nuca. Juegos como Mafia, Saint's Row o Driver también son referentes obvios del género.

Este género también ha tenido sus escarceos con el mundo fantástico, generalmente de superhéroes. Tenemos ejemplos como Spiderman 3, Crackdown, InFamous o Hulk: Ultimate Destruction. Este último nos interesa especialmente, pues se trata de una obra de los canadienses Radical Entertainment. Esta desarrolladora lleva largo tiempo dedicándose a crear videojuegos basados en marcas ya existentes: Mario, Hulk, Rocky, el divertidísimo Jackie Chan: Stuntmaster de PSOne, Terminator y Scarface (otro sandbox), entre otros. De su larga e irregular carrera como desarrolladores, el título que nos ocupa es la primera licencia genuina del estudio. En este videojuego pretenderían a priori reunir las cualidades que hicieron de Hulk: UD un gran juego. Era la evolución lógica de la fórmula vista en este título, compartiendo la jugabilidad sandbox con los superpoderes y, sobretodo, la destrucción. 20090625_00011.jpg 

Prototype, el título de su primera obra propia, ha tratado por todos los medios de lograr establecerse como un referente fuerte dentro de este género, una evolución notable del título antes mencionado. Para lograr ese objetivo se sirvieron de un largo tiempo de desarrollo (algo más de dos años) y de diversos retrasos que, observando el resultado final, se antojan algo improductivos. Un juego que se ha quedado en el camino de la gloria. ¿Quieres saber porqué? pues pon especial atención al análisis que te hemos preparado en XboxGo. Destruyamos Nueva York a nuestro antojo...

Historia

02 [1]

Controlamos a Alex Mercer, un hombre con extraños poderes y sin recuerdos. Comenzaremos en una Nueva York totalmente hundida en el caos y en la guerra, consumida completamente por un extraño virus que muta a todos los habitantes transformándolos en monstruos y abominaciones diversas. Al otro lado de esta batalla campal que nos servirá de tutorial tenemos al ejército Blackwatch, la última línea de defensa del estado, los que se encargan del trabajo sucio cuando la situación se vuelve insostenible. Estas dos facciones serán las que batallen durante todo el juego, y si queremos podemos participar en esta refriega para ganar puntos de experiencia y mejorar nuestras habilidades. A pesar de empezar con este caos, en un inicio de juego totalmente alocado e intenso, descubriremos que se trata de la parte final de la historia. Una vez superado el tutorial, Alex Mercer narrara a partir de un flashback todo lo que ha ocurrido hasta llegar a esta situación límite. Para ir desgranando la historia y desbloquear de esa forma los recuerdos de Mercer tenemos que utilizar una de las habilidades de nuestro protagonista: absorber a otros humanos, con lo que no solo adoptaremos su forma sino también sus habilidades y sus recuerdos. Estos últimos nos ayudaran a recomponer la Red de Trama, que se irá llenando con los recuerdos de cada uno de los personajes. Tendremos diferentes líneas argumentales que iremos llenando con cada uno de los personajes que se nos requiera. Esta red es extensa y tendremos que asimilar a muchísimos personajes para desbloquearla del todo. Esta historia es bastante simple, ya que desde el principio hasta el final Mercer solo quiere vengarse, matar a todo aquello que se mueva y descubrir su pasado. Existen ciertos giros argumentales no demasiado profundos que otorgan algunos momentos de interés, pero por lo general la historia no es un alarde de originalidad precisamente. Si es cierto que a pesar de que las primeras horas de juego no tienen prácticamente ningún atractivo argumental, a medida que se avanza esta historia mejora intermitentemente, con lo que a pesar de ir atrapándonos un poco más no consigue cuajar del todo. Es una pena, ya que tanto al protagonista como a otros personajes secundarios se les podría haber sacado mucho más jugo (esperemos que se mejore de cara a una segunda parte que, visto el final, parece que existirá). Esta historia se puede terminar en unas ocho horas o incluso menos, en caso de ocuparnos poco de otros asuntos. 

Lo más interesante sin duda es ver como el entorno evoluciona, como el virus se propaga y lo que inicialmente es una ciudad tranquila y despreocupada se convierte poco a poco en un infierno, en un campo de batalla multitudinario y brutal. Y de hecho este último adjetivo se le puede aplicar a algunos apartados del título: la historia es bastante madura, cruda e incluso cruel. No escatimará en detalles y tampoco en ácidas críticas al gobierno y al ejército.

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7.7

Lo mejor

Sencillo de manejar a la par que completo.

No existen cargas durante los paseos, aunque sí entre cinemáticas y misiones.

Recrea de buena forma Nueva York y transmite la sensación de caos y batalla campal.

Mueve gran cantidad de personajes en pantalla sin tirones ni otros fallos gráficos.

Es simple y divertido.

Lo peor

Modelados y texturas de muy mala calidad.

Poca distancia de visión.

Algo repetitivo.

Falta variedad en misiones.

Bastante corto, con poca rejugabilidad.

¿Cómo analizamos?