Análisis Sleeping Dogs

Si algo está de moda en el mundo de los videojuegos en esta generación ha sido el género de los sandbox, ya sea de mejor o peor manera, los desarrolladores han querido poner especial hincapié en ofrecer entornos abiertos y con un mundo rico de detalles, así como poder ofrecer una vida dentro del título que haga que el mundo real sea expandido dentro de un mundo virtual. Grand Theft Auto IV y presumiblemente en su quinta entrega es el vivo ejemplo del género en los videojuegos, aunque también hay que destacar otros que no entran con tanta fuerza pero que son muy respetables y que siguen los cánones impuestos por los desarrolladores de Rockstar, como lo pudieron ser Mafia, Saint’s Row que ofrecen la calle en nuestros días o con gran proximidad y que quieren sumergirnos de una manera legítimia. Por otra parte Assassin’s Creed lo ofrecen con una mayor elegancia y dinamismo, pero son el mismo cometido, una gran cantidad de historias, misiones primarias y secundarias.

Misiones a gran velocidad

Guión digno de una superproducción de Hollywood

El juego que nos centra hoy es Sleeping Dogs, que ha sido desarrollado por Square Enix y uno de sus estudios internos, que es conocido como United Front Games, que han querido ofrecer su propia visión de como debe ser el género y a través de sus pupilos han dado una entrega que ha de ser tenida muy en cuenta, trasladando a unos entornos que hasta la fecha no habían sido vistos y que pese a ser innovadores, bebe mucho del género. Pero… ¿para qué cambiar lo que siempre ha funcionado tan bien? Ahora os explicamos si el juego cumple con las expectativas creadas y si es uno a tener en cuenta para este fin de verano.

Si por algo se caracteriza un buen sandbox es por su historia, un hilo argumental que traslade y sumerja a los jugadores en una historia enrevesada y que se vaya atando sus cabos sueltos poco a poco a medida que se vayan realizando sus misiones principales (para conocer detalles lineales de la historia) y las secundarias (para los coleccionistas y que deseen conocer hasta el más mínimo secreto de la vida de Wei Shen, nuestro protagonista). Por lo tanto, el juego nos trasladará a Hong Kong, a la pequeña China y a sus ajetreadas calles cargadas de pobreza, desolación y sobretodo extorsión, un punto muy importante que nos presenta a nuestro protagonista, Wei Shen, que ha llegado desde los Estados Unidos siendo todo un hombre de ciudad que bien conoce como son las calles de ambos países. Wei asume el papel de ser todo un agente doble, que a parte de trabajar la policía a favor del país chino, también será un encubierto que deberá de infiltrarse en todas las mafias y extorsionadores del país en busca de un peligroso criminal, en una historia de traición, violencia, asesinatos y sobretodo intereses cruzados de cada una de las personas que luchan por conseguir su propia supervivencia. Dentro de una historia muy bien trenzada y con un apoteósico desenlace nos hace tener una línea argumental que nos hace dejarnos llevar e interesar por conocer hasta el más mínimo detalle. Su guion bebe directamente de las novelas y películas de la mafia china, lo que hace que muchas de las situaciones nos recuerden a estas, pero que son la seña de identidad de los modus operandi de las Triadas.