Análisis The Sly Trilogy

Desde el lanzamiento del primer Classics HD en PlayStation 3, hemos tenido todo tipo de colecciones que, si bien muchas han intentado resucitar una maravillosa franquicia, y otras las han dejado por los suelos. En el caso que hoy nos toca, 'The Sly Trilogy', gozamos de una perfecta trilogía de tres estupendos videojuegos de hace dos generaciones, con un muy buen lavado de cara. 

Antes de llegar la franquicia 'inFamous', Sucker Punch desarrolló un mundo en el que los animales hacían las veces de los humanos. En el título 'Sly Raccoon' controlábamos a un mapache que, tras el terrible asesinato de sus padres, es enviado a un orfanato en el que conoce a sus dos futuros compañeros de robos, Murray y Bentley. Con el paso de los años, los tres acaban formando un equipo con el objetivo de recuperar el llamado Latronius Mapáchibus, un libro que contiene la historia de su familia y los mejores trucos para convertirse en el ladrón perfecto.

Es así como empieza la historia de Sly Cooper y sus compañeros, que resucitan sus viejas entregas en PlayStation Vita de la mano de Sanzaru Games, para presentar en un único pack los tres primeros videojuegos que llegaron de manera exclusiva para la 128 bits de Sony. Ahora podremos disfrutar en cualquier parte del mundo llevándonos nuestra portátil fuera de casa. 

El mapache ladrón

En la primera entrega de la franquicia, 'Sly Raccoon', nuestro protagonista se enfrenta a los Cinco Malvados, un grupo de criminales que roba la preciada reliquia de Sly, el Latronius Mapáchibus, dividiéndola en cinco fragmentos y escondiéndolos en sus distintas guaridas.

Mientras nuestros protagonistas se encuentra detrás de la pista de los Cinco Malvados, Sly trata de deshacerse de la justicia al mismo tiempo que es perseguida por Carmelita Fox, una agente de la Interpol por la que también se encuentra sentimentalmente interesado.

Sly Cooper es una de las mejores sagas que aparecieron en PlayStation 2

A diferencia del resto de secuelas, en 'Sly Raccon' controlamos únicamente al propio Sly en siete niveles divididos en cinco mundos. El objetivo en cada nivel es encontrar las llaves que nos dan acceso al jefe, que guarda una de las partes del deseado artefacto de Sly. El juego quizás se apoya demasiado en la linealidad, con un único camino en el que moverse, lo que hacen de la mecánica del juego algo demasiado fácil y simplón, aunque sin desprestigiar la estupenda jugabilidad del título.

'Sly Raccon' es un videojuego exageradamente corto, aunque se ve beneficiado de una gran personalidad, gracias a su acertado doblaje en castellano, en la que destaca el carisma del propio Sly. También la variación de niveles, que pueden llegar a ser desde secciones de sigilo hasta la acción y las plataformas, adornado todo ello de un apartado gráfico y sonoro realmente admirable para la época.

Las habilidades del mapache al principio de la aventura no son para nada novedosas, el personaje puede hacer lo típico en un videojuego del género, pero consiguiendo las páginas del Latronius Mapáchibus conseguiremos nuevos movimientos entre los que encontramos la habilidad de avanzar a cámara lenta, colocar señuelos para engañar a los enemigos, correr más rápido, etc. Para recuperar las páginas de la desaparecida reliquia de Sly, tendremos que encontrar las cajas fuertes de cada nivel, pero para abrirlas necesitaremos un códigos que estará metido dentro de unas botellas repartidas por el videojuego, al conseguir un número concreto de estas botellas seremos recompensados con una nueva habilidad para nuestro mapache.