Análisis Wonder Boy In Monster World

(Wii)

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Otra de las grandes mascotas de SEGA se pasa por la CV de Wii

Plataforma analizada: Wii
07/07/2008 19:32
En la historia de Sega ha habido varias mascotas, un príncipe chino que pese a su procedencia se llama Alex Kidd, una entrañable navecita que es capaz de desquiciar al mas pintado, Opa Opa del genial Fantasy Zone, un chaval que empezó su andadura con un taparrabos y acabó embutido en una armadura, Wonder Boy y por ultimo el erizo azul que nos cautivo a todos, Sonic the Hedgehog.

Hoy nos centraremos en el tercero de la lista, Wonder Boy, más concretamente en la entrega que salio para la 16 bits de Sega, Wonder Boy In Monster World.

Era un día por la mañana como cualquier otro, y sin motivo aparente, Shion, nuestro protagonista, que estaba placidamente en su casita del prado, decide salir para salvar el mundo, lo que todavía no se es como se entera de que su querido mundo esta siendo atacado por una horda de monstruos, ya que no hay ninguna especie de intro que nos meta en la historia, aunque, ¿que se puede esperar de un lugar que se llama Monster World?

Ni corto ni perezoso empieza a recorrer el mundo en busca de aventuras, se enfrentara a mil y un esbirros, desde setas mutantes hasta pingüinos gigantes, también tendrá que usar el ingenio para derrotar a algún enemigo de final de fase y para encontrar los objetos que le permitan avanzar en la aventura.

Wonder Boy In Monster World

También contaremos con la ayuda de unos personajillos que nos acompañaran en nuestras andanzas, desde un hadita muy mona, pasando por un enano con malas pulgas, un ser sospechosamente parecido a un mago negro de Final Fantasy y terminando por un dragoncito que nos ayudara con su mini-aliento de mini-fuego.

El juego para ser de 1992 tiene unos gráficos mas que aceptables y además es muy colorista, Los sprites son grandes y por lo general están bien animados.

Lo único que se le puede echar en cara es que el prota mas que andar, patina, además, de cintura para arriba al caminar no tiene ninguna animación con lo cual anda como si se hubiese tragado un perchero.

Las melodías son bonitas y pegadizas, evidentemente no es lo que estamos acostumbrados a escuchar ahora, son músicas en midi, pero cumplen su papel con creces. Lo que no suena tan bien son los efectos de sonido, suenan bastante a lata pero en conjunto queda todo bien.

Wonder Boy In Monster World

La dificultad es normal al principio pero conforme se avanza la cosa se recrudece, lo que parecía un juego para niños se convierte en más de una ocasión en un reto.

Combina a la perfección trozos completamente arcade, de avanza y machaca, con elementos de RPG, como resolución de puzzles, encontrar ciertos elementos para poder avanzar a las siguientes zonas, conseguir oro para poder mejorar el equipo y que nos tenemos que equipar, valga la redundancia, las piezas que compremos o nos encontremos, no se actualiza automáticamente al coger una pieza superior como en Wonder Boy in Monster Land, además cada pieza nueva que nos encontremos tiene sus estadísticas de ataque, defensa y velocidad, así que lo mejor es ir combinando, y sobre todo, que quede bien el conjunto, ya sabéis, no se puede salvar el mundo desconjuntado, ¿con que cara saldrías en el periódico local?

Una de las cosas que mas me gusta de WBMW es su duración, no es un juego que te pasas en un par de horas, además tiene y la posibilidad de grabar partida en las posadas, con lo cual no hace falta tener la consola encendida varios días para llegar a terminarlo, todo son ventajas.

El juego esta lleno de homenajes a su segunda entrega, WBML, tanto por algunos enemigos comunes como por localizaciones, por ejemplo, el principio de la aventura es prácticamente igual.

Wonder Boy In Monster World

Una de las cosas que me llamó la atención, y que es completamente irrelevante, es que para entrar por una puerta, ya sea una taberna, una armería, o una tienda de magia, en WBML Wonder Boy llama a la puerta y no puede hacer nada mas excepto elegir que comprar. En WBMW es un poco mas “mal educado” porque no llama a la puerta, directamente se cuela, pero al entrar se ve una transición de pixels que da la sensación de entrar al lugar, una vez dentro te puedes mover y aparte de comprar también puedes hablar con los personajes que pueda haber, que dicho sea de paso suelen dar jugosa información.

Una curiosidad para terminar, jugando a esta entrega de la saga me he percatado del amor/odio que profesaba SEGA hacia Nintendo por aquellas fechas, me explico.

Tanto en WBMW como en WBML había enemigos que eran setas, que por coincidencias del destino tenían topos verdes, como la seta de vida extra del primer Super Mario Bros, en WBML sale como enemigo un gorila enfurecido que te tira pedruscos a la cabeza, cambiad los pedruscos por barriles, en WBMW en cierta parte del juego hay que tocar una serie de melodías con un instrumento, ¿a que no adivináis cual? exacto, con una ocarina.

Wonder Boy In Monster World
Wonder Boy In Monster World
Wonder Boy In Monster World

Y aquí concluye mi primer articulo, espero que os haya entretenido, y a su vez os haya despejado alguna duda, si es que la teníais, respecto a comprar este juegazo de la consola virtual.

9

Lo mejor

Dificultad que aumenta progresivamente

Lo peor

Efectos de movimiento del protagonista poco realistas

¿Cómo analizamos?