(360)
El juego, eso sí, ofrece distintas recompensas a medida que vamos completando canciones. Existen tres modos de dificultad pero tendremos que completar uno para optar al siguiente. Cada bloque de cuatro canciones superado con al menos 4 estrellas (de 5) desbloquea un Desafío, que no es más que un remix de las canciones en secuencia. Tal y como sucede con los juegos de tipo Karaoke iremos subiendo de nivel y pasaremos de Novato a Estrella, también desbloquearemos un nuevo aspecto para cada personaje y nuevos escenarios hasta completar un total de 8. No sustituye al añorado modo Historia pero motiva lo suficiente para tratar de desbloquearlo todo.
Una vez sobre la pista comprobaremos que la precisión de Kinect para captar nuestro cuerpo es capaz de convertir una experiencia divertida en algo retante para los más exigentes. Sin ser un título hardcore, los más de 600 movimientos y las 90 rutinas de baile ofrecen la variedad suficiente como para llegar a convertirnos realmente en unos bailarines competentes si nos lo tomamos en serio. Mientras el personaje ejecuta un paso la cámara detecta todo nuestro cuerpo y remarca aquellas partes que movemos bien o mal con un resplandor verde o rojo, de forma que podamos corregir sobre la marcha o en el siguiente intento.
La evolución en este sentido es evidente respecto a los primeros juegos de baile (los de la alfombrilla de la saga de Konami Dance Dance Revolution) o la ya citada Just Dance de Wii que se limita a mover los brazos Wiimote en mano. Gracias a la oferta tecnológica de Kinect, Dance Central se sitúa varios cuerpos por delante de sus rivales convirtiéndose en el mejor videojuego de baile y el sensor en la plataforma ideal para los bailarines incipientes.
Dicho esto, todavía existe margen de mejora y esperamos que futuras entregas corrijan los defectos. Para empezar Dance Central no devuelve el suficiente feedback al jugador sobre si lo está haciendo mejor o peor más allá de ese código de colores. En una esquina de la pantalla aparece nuestra silueta recortada en un fondo negro que no tiene mayor trascendencia. El bailarín que ocupa la pantalla siempre ejecutará el baile a la perfección y el sistema funciona a base de imitarle. Es cierto que la precisión es muy alta - siempre ofreciendo un margen, claro - y, aunque no lo veamos en pantalla se nota que el juego detecta cuando un pie esta mal colocado o nos equivocamos con los brazos. Quizás si el bailarín fallase el paso cuando nosotros fallamos la cosa cambiaría, sería más evidente ver que la tecnología que hay detrás está funcionando bien.
Como curiosidad, y algo muy habitual en gran parte de los juegos para Kinect, cada canción tiene una parte "FreeStyle" donde podremos movernos a nuestro aire mientras la cámara nos graba. Suele coincidir con el mitad de la canción y en cuanto acaba podremos vernos a nosotros mismos en nuestro salón o habitación a cámara rápida. Las imágenes dantescas y las risas están, por supuesto, aseguradas.
La selección de temas escogidos se centra en el estilo dance-pop y hip-hop, mezclando canciones de rabiosa actualidad como "Poker Face" de Lady Gaga o "Pon de Replay" de Rihanna con clásicos como "Push It" de Salt'N'Pepa o "Bust a Move" de los Young MC. Aquí tenéis la lista completa de 32 canciones:
Lo mejor
La detección de todo el cuerpo permite ofrecer la experiencia de baile definitiva (de momento).
La ambientación y la sencillez en la navegación de los menús, todo un acierto.
Su precisión le permite ser todo lo exigente que queramos.
Divierte, enseña, sirve como ejercicio... ¿se puede pedir más...?
Lo peor
Quizás una mayor selección de canciones no habría estado mal, las descargables son caras.
Modos de juego justitos, sin modo historia ni tienda para personalizar a los bailarines.
La ausencia de dos jugadores simultáneamente, aunque requeriría muchísimo espacio.
SeccionesNoticias de videojuegosGuías de videojuegosAnálisis de videojuegos
NoticiasNoticias SwitchNoticias PS4Noticias PS5Noticias PCNoticias Xbox OneNoticias Series X
Política de privacidad Política de cookies Publicidad Contacto
© 2021 Red ADN pertenece a la red digital de portales de Hyliacom, Agencia de Marketing Digital
Polígono Industrial Río do Pozo, Parcela 1-3 Local 13, 15573 Narón, A Coruña